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Cuando fue anunciado el nuevo Sony Ericsson Xperia Play, muchos presagiaron que este teléfono-consola estaba destinado a marcar un antes y un después en la forma de entender los juegos en los teléfonos móviles, y que serí­a el comienzo de toda una oleada de terminales similares. Por ahora, el Xperia Play ha tenido un discreto comienzo, y es que su furor inicial se ha ido apagando. Su catálogo de juegos es sumamente pobre y Sony apenas anuncia novedades para él.

No obstante, a Nokia puede haberle gustado mucho la idea, y su reciente alianza con Microsoft puede hacer que los finlandeses prueben suerte e intenten lograr lo que N-Gage no pudo, lanzar al mercado un teléfono muy avanzado y perfectamente apto para el juego. El Nokia-Xbox podrí­a ser una realidad muy pronto.

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Desde que Nokia anunciara su alianza con Microsoft para lanzar en el mercado una nueva oleada de smartphones, muchos asociaron automáticamente esta unión con la posibilidad de que un teléfono Xbox viera la luz. Y no serí­a descabellado, puesto que entre los lanzamientos de Nokia-Microsoft para finales de año se encuentra un terminal con key pad fí­sico. Si Xperia Play no acaba de triunfar, el camino quedarí­a allanado para que los de Redmond y Espoo lanzaran el terminal definitivo.

Hay que tener en cuenta también que la asignatura pendiente de ambas compañí­as sigue siendo una plataforma de juegos consistente. En el caso de Nokia por el fracaso de N-Gage y en el de Microsoft por no disponer de una plataforma portátil de juego en el mercado, dispuesta a rebañar algo del pastel que se lleva Sony con PSP y Nintendo con la familia DS.