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Aprovechando que Nintendo estrena hoy en el mercado europeo su nueva consola portátil, la 3DS, queremos rendir un homenaje, al primer intento de los japoneses por introducir las 3d en los videojuegos. Esto ocurrió mucho antes de que Nintenido 3DS fuera ni siquiera soñada, ya que allá por 1995, Nintendo lanzó al mercado su Virtual Boy, un novedoso sistema de entretenimiento doméstico semi-portátil, que permití­a jugar a los juegos en 3D. ¿Su resultado? un rotundo fracaso.

¿Nintendo lanzó una consola en 3D hace 16 años?, si, y la respuesta a por qué la consola es una desconocida para el gran público, es porque su fracaso comercial en Japón y Estados Unidos, hizo que Nintendo desistiera de lanzarla en Europa. ¿Pero por qué fracaso Nintendo Virtual Boy?, a priori era una consola adelantada a su tiempo, su precio no era una salvajada, y encima podí­as jugar en 3d. Tras el salto analizamos uno de los casos más curiosos de la historia de los videojuegos.

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Nintendo 3DS se ha lanzado al mercado en otros tiempos, los cines están plagados de producciones en 3D, los primeros televisores con visión estereoscópica empiezan a ser un poco más asequibles, y atrás quedaron los viejos cómics que se veí­an con unas gafitas con lentes azul y roja. El segundo intento de Nintendo por quitarse la espinilla de las 3D, va viento en popa, aunque Nintendo ya fracasó una vez con esta tecnologí­a.

En 1995, en plena madurez de Super Nintendo, la compañí­a lanzaba en el mercado japones Virtual Boy, una consola novedosa, de aspecto futurista y cuyo principal atractivo era que podí­a jugarse en 3D. Las tres dimensiones habí­an acabado muy mal paradas en los años 80, ya que no consiguieron integrarse ni en el cine ni en los hogares. Por tanto, el intento de Nintendo se antojaba cuanto menos arriesgado. Virtual Boy fue diseñada por Gunpeo Yokoi, famoso por haber creado la super ventas portatil, Game Boy. La consola disponí­a de un mando, y un tripode donde se situaba un visor, al que el jugador debí­a aproximarse para visualizar el contenido del juego. Lo que ya de por sí­, ofrecí­a una limitación de movilidad importante. Imaginaros que os picaba una ceja, no habí­a otro remedio que sacar la cabeza, parar el juego, rascarse y volver a meterse dentro de la consola.

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El fracaso de la Virtual Boy vino motivada por ciertos factores, en realidad, estos factores pudieron haberse solventado con un buen planteamiento de diseño antes de sacar la consola al mercado, pero Nintendo se equivocó, y Virtual Boy lo pagó caro. Para empezar, el sistema era pesado y grande, demasiado para poder jugar con soltura y comodidad. Por si fuera poco, uno de los factores que contribuyeron a su fracaso fue el pánico de los padres a que sus hijos sufrieran problemas visuales, ya que en la caja de la consola y en el manual, se avisaba de una más que probable fatiga visual, motivada por el uso continuado de la consola, sobre todo en menores de 7 años.

Muy pocos fueron los desarrolladores de juegos que quisieron sumarse a la creación de juegos para la Virtual Boy, de hecho, el juego más vendido fue Mario Tennis, marca de la casa. Virtual Boy llegó a ofrecer solamente 22 juegos en el mercado americano y 25 en el japones. Pocos tí­tulos para que una consola triunfe, además, cada juego podí­a verse en 3D pero en una gama de colores monocromática, lo que hací­a insulsa la experiencia de juego.

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Tal era el efecto de las 3D de Virtual Boy sobre nuestro cerebro, que la consola disponí­a de una opción, para que se pausara automáticamente el juego, tras superar el lí­mite recomendado de 15-20 minutos de juego. De esta manera, se preverí­an cansancios oculares y dolores de cabeza. Todos estos factores hicieron que Virtual Boy muriera prácticamente antes de nacer.

800.000 consolas Virtual Boy, vendió Nintendo en el poco tiempo que estuvo a la venta (menos de 6 meses). Hoy en dí­a, tener una de estas consolas es tener una joya, ya que en sitios como Ebay, llegan a pagarse hasta 500 euros por una Virtual Boy. Si la nueva Nintendo 3DS se convierte en un rotundo éxito, puede que el amargo recuerdo de Virtual Boy quede como una mera anécdota para Nintendo, ya que por fin, habrán hecho triunfar sus ansiadas 3D.