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¿A quién no le ha pasado que su consola se haya estropeado alguna vez? No nos referimos al caso de los que piratearon su Xbox 360 y ahora no pueden jugar en red, sino a quienes con buena fe acudieron a su servicio técnico correspondiente para que repararan su plataforma. Es, por desgracia, un hecho común y extendido, pero, ¿sabemos cómo actuar ante esta situación?

Un estudio reciente ha servido para medir la salud en la calidad en los servicios técnicos de las tres principales fabricantes de consolas (Sony, con la PlayStation 2, Microsoft con la Xbox 360 y Nintendo con su Wii). A tenor de los resultados, las conclusiones son de lo más variopinto, aunque coinciden en un punto: las irregularidades están a la orden del dí­a.

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La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) elaboró un informe a partir de la visita anónima de inspectores a 20 establecimientos de reparación, contando oficiales y no oficiales. Precisamente estos últimos fueron los que más pecaron de estafadores, ya que nueve de los 17 servicios de visitados llevaron a cabo reparaciones de piezas que funcionaban perfectamente. Y lógicamente, las cobraron.

No fue mucho más halagí¼eña la experiencia en lo que a plazos de entrega se refiere. Mientras que las casas oficiales de Sony y Microsoft fueron medianamente razonables (con devoluciones de la plataforma reparada de 16 y 21 dí­as, respectivamente), Nintendo se dilata a los casi dos meses. Y en algunos establecimientos no oficiales requirieron de casi tres meses para entregar la consola.

A nivel informativo, los servicios técnicos son negligentes en la mitad de los casos. Esto se desprende de la escasa claridad tanto en las facturas como en los presupuestos (en el caso de que éstos se elaboren, ya que en muchos casos fueron transmitidos «de viva voz»). Para la OCU, el trato más satisfactorio corrió de la cuenta de Microsoft, que en lugar de reparar la Xbox 360, se limitó a sustituirla por una nueva preparada para la reproducción de juegos en alta resolución. Sony ofrecí­a la posibilidad de cambiar la consola por una nueva, aunque en este caso con un coste de 78 euros.

Los comportamientos fundamentales a la hora de ponerse en contacto con un servicio técnico serí­an pues los siguientes: pedir un presupuesto por escrito, solicitar con toda claridad unos plazos de entrega y un desglose de las piezas a sustituir con sus precios exactos. Y, por supuesto, a la entrega de vuelta de la consola, solicitar las piezas que se hayan cambiado para evitar que nos den gato por liebre.

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